Un golpe fulminante venido del infinito
Me dejo una pena infinita,
Las moléculas y átomos de mi existencia insensata
Se estrellan en el negro abismo de la nada.
Colapsado el universo
se nubla mi grito lleno de sangre ,
en silencio muero eterno,
Vestido de bestia de carnes negras.
Vocifero en la esquina de un horizonte irracional
Llego tarde y lejos
A un edén que ahora parece incendiado.
Enloquecido corro
Y con mi amargura de niño
Escarbo en pesadillas
hasta lograr encontrar tus ojos